Hay indicios que sumados conducen a una certeza. Dos meses de indefiniciones lo hartaron a Darío Eduardo Ranco, que en la noche de hoy volvió a manifestarse a través de publicaciones en las redes sociales.
Hace algunos minutos (00.13 hs) en la red social Facebook publicó: “Di todo lo que pude dar como dirigente. No se pudo. Exitos. Que viva el fútbol. Abrazo de gol”.
El pasado 21 de noviembre a la medianoche (00.06 minutos) por la misma vía había expresado lo siguiente:
“Necesitamos los dirigentes deportivos del fútbol tener actos de grandeza y saber reconocer que necesitamos capacitarnos para estar al frente de una institución, ya que estamos administrando el patrimonio de nuestros socios!
De no ser así es muy difícil el crecimiento de nuestros clubes.
No deseo ofender a nadie, sólo es mi pensamiento.
Bendiciones.
El 30 de septiembre Ranco había anunciado su intención de ser candidato a la presidencia de la Liga Villamariense de Fútbol y de inmediato encontró varios dirigentes que salieron a respaldarlo, siendo Alumni el primero de los clubes en manifestarse públicamente. Lucas Martinetti se sumó y de inmediato el Grupo Unión Central que apoyaba la candidatura de Diego Conrero también quedó alineado dentro de la misma línea.
Desde entonces se sucedieron algunas reuniones de las que habrían participado hasta algunos intendentes, pero la falta de respuestas concretas habrían generado un malestar que desembocó en las publicaciones aludidas, separadas por apenas nueve días.
La jornada de hoy seguramente podrá aportar mayores precisiones sobre las publicaciones de Darío Ranco, pero todo parece indicar que hay una decisión tomada. La primera de las publicaciones fue un aviso, luego hubo una reunión con varios dirigentes y ahora un nuevo texto permitiría suponer que el ex presidente de la Liga en el período 1998-2000 y luego durante casi trece años titular de la Federación Cordobesa de Fútbol no volverá a dirigir los destinos del fútbol regional.
Ranco había señalado que sólo quería presidir la Liga durante un mandato de tres años y anunció que durante su mandato los clubes no iban a abonar cuota alguna porque estaba dispuesto a generar los recursos que cubrieran esa demanda. También planificó un Colegio de Arbitros a cargo de Gabriel Chiaraviglio y el Tribunal de Penas con Eduardo Rodríguez y René Gandarillas, entre otros.
La inacción y la falta de compromiso de algunos clubes habrían sido determinantes para que el experimentado dirigente se manifestara a través de las redes sociales.
Ranco no se refirió específicamente a no avanzar en su proyecto pero en ese “DI TODO. NO SE PUDO” hay una lectura amplia y contundente. Tenía los votos para ganar una elección por mayoría, pero la quietud de los representantes de algunos clubes fue determinante para llevarlo a tomar una decisión que aún no se hizo pública, pero que se vislumbra en el contenido de sus publicaciones.