Todavía retumba en la Leonera el “¡Dale campeón, dale campeón!” que se gritó ayer luego de la coronación de Ameghino en la Liga Provincial U19, tras quedarse con el Final Four que no solo le dio el título en forma invicta, sino también la clasificación al Campeonato Argentino.
Historia pura. Por primera vez la institución consiguió estos logros en una categoría formativa, por lo que nadie pudo ni quiso ocultar la emoción tras la chicharra.
Mateo Peralta es el capitán del equipo y uno de los que más años lleva en Ameghino. “La verdad es que siento orgullo. Es un sentimiento especial, son muchos años en el club y nunca se nos había dado un campeonato así. Jugando bien, pero entrenando muchísimo”, fueron sus primeras sensaciones en pleno festejo.
Peralta consideró que “esto va a quedar en la historia del club” y remarcó que el logro es una consecuencia de años de trabajo: “Hoy me cruce a un amigo con quien jugábamos cuando éramos chicos. Él recordaba el primer parquet del club, no había tribunas, y uno ahí se da cuenta que con el crecimiento que tuvo el club también creció cada uno individualmente y como grupo”.
“Todavía no caigo”, resumió el entrenador, Nicolás Tilloy, tras la victoria ante San Isidro. “Hace un año que estoy en Ameghino, esto viene desde hace muchos años. Desde que Pablo Castro vino, cuando el piso era de cemento y había cuatro chicos por categoría”, rememoró.
El DT insistió con que “esto también es de Sebastián Sucarrat, de Cintia Vendrame, de Aaron Mussa, de todos los que hacen Ameghino día a día”, resaltando el trabajo de quienes están y estuvieron en la institución.
Sobre la definición, confió que intentó mantener motivado al equipo. “Son chicos que no son chicos, son pibes que entrenan como profesionales, intenté bajarlos todo el tiempo a la tierra, que tomen conciencia del momento, porque una diferencia de 9 puntos no es nada en una final, que confiaran en el trabajo que hicieron día a día”, ilustró.
“Son chicos que te llaman un sábado a las seis de la tarde para venir a hacer fundamentos, cuando cualquier otro estaría en la costanera o en una plaza. El sacrificio que hacen es enorme”, resaltó sobre sus dirigidos.
El vicepresidente Pablo Giraudo, visiblemente emocionado, alcanzó a decir primero que “uno puede ser campeón del Provincial en primera invirtiendo más que otros, pero ser campeón en esta categoría es fruto del trabajo de muchos años”.
“Hoy miraba las fotos del estadio en el 2011 y pensaba que para valorar el presente hay que mirar el pasado. Esto es una alegría inmensa, entrábamos a los primeros provinciales y perdíamos por 70 puntos”, recordó y resaltó que “es una categoría que tiene 10 chicos de Villa María, más algunos que han ido llegando, y todos se rompen el alma entrenando”.